Diferentes concesionarios de las playas urbanas de Mallorca (Llevant, Migjorn, Pollença, Alcudía, Sóller, Llucmajor, etc), no están dispuestos a tomar las riendas de los servicios actuales del litoral, después de conocer que no se rehabilitarán los arenales, paseos, zonas de baño.

Según la mayoría, los precios que pagan a la Demarcación de Costas y a los Ayuntamientos son astronómicos y el año pasado ya perdieron mucho dinero, de continuar así no participarán en la licitación si tienen que renovar o ir a nuevos concursos. Se han canso de poner dinero de su bolsillo.

Si no hay concesionarios en las playas urbanas de Mallorca, nadie retirará las algas sobrantes de la zona de protección de la posidonia, no habrá hamacas ni sombrillas, no se limpiarán las playas a diario de todo tipo de basuras y colillas, no habrá servicio de socorristas ni se cambiarán las banderas para advertir de los peligros ni el estado de la mar a diario. Nadie vigilará el cumplimiento de las normativas ni ordenanzas y no habrá deportes de ocio en nuestras playas.

Los concesionarios/as se han cansado de soportar un gasto añadido que hace imposible cuadrar las cuentas, al precio de la concesión para Costas y Ayuntamientos, hay que sumar vigilantes, socorristas, embarcaciones, limpieza de la costa, auxilios, servicios extraordinarios, rampas de acceso, mantenimiento de duchas y arenales, vegetación, limpieza de basuras, reposición de hamacas rotas y sombrillas. Cada vez pueden poner menos instalaciones y son mayores los gastos en seguridad. Dicen basta.